Todas las perdidas, físicas, emocionales, da igual, todas necesitan un tiempo de duelo en el que las dejas ir, asumes que ya no están.
Si la perdida es súbita, el duelo comienza de forma abrupta, el duelo es un shock, alguien que tenías, querías y a veces necesitabas, de repente ya no está.
Otras veces, la perdida, es lenta, sinuosa, y el duelo es lento, muy lento, día a día, año tras año, esa persona va desapareciendo en tu vida, su presencia, su apoyo cada vez es menor, hasta que llega un momento que cuando físicamente desaparece de tu vida, ya no hay shock, a veces es una liberación.
Cuando me separé sentí eso, liberación. Llevaba años sufriendo su ausencia física y emocional, aprendí a vivir sin él. Cuando me fui de casa, simplemente tuve que dejar de disimular.
Llevo desde los 19 años sufriendo el duelo de la ausencia de mi madre, su falta de cariño, de preocupación y ocupación de mi como hija. Ella siempre fue como una "carga" siempre ese pensamiento de no hacerla sufrir. No se cómo me sentiré cuando se vaya. Hoy por hoy es una obligación que atender. Verla como alguien que es manipuladora con su victimismo, y ya, no se puede hacer nada.